Este domingo, el nuevo entrenador del Sevilla, Míchel, cumplió su décimo partido oficial con el equipo. Ha habido de todo, momentos felices y no tan felices. Pero creo que todos estamos de acuerdo en que este Sevilla ha cambiado para mejor, a pesar de que ayer no se ganara (no se va a ganar todo).
Míchel debutó con el Sevilla con derrota ante la Real Sociedad, por 2-0. Cogió al equipo y en una semana ya tenía que tenerlo todo listo. Es normal que no se venciera, pues no da tiempo en tan pocos días a planificar el equipo que deseas.
En el próximo choque ya pudimos ver a un equipo mejorado, que venció 2-0 a Osasuna, un equipo fuerte este año, sin duda.
Y si buenos fueron estos tres puntos después de 7 jornadas sin ganar, mejor serían los conseguidos en Mestalla ante todo un Valencia: 1-2. Confianza y moral para los jugadores.
No eran fáciles los rivales que teníamos delante, y es que después en casa nos enfrentamos al Atlético de Madrid de Simeone. Empate a uno y un punto que no servía de mucho, y que pudieron ser tres, a parte del gol anulado a Manu del Moral que hoy día sigue sin saberse si fue o no realmente fuera de juego.
A continuación, el Sevilla volvió a perderse en el camino, y dejó escapar tres puntos que actualmente seguimos echando de menos, ante un Sporting hundido. 1-0, y vuelta a lo mismo de siempre.
En casa recibíamos luego al Barcelona, con la idea de que perfectamente podíamos perder. Así fue. 0-2 y a otra cosa mariposa.
Pero fue entonces cuando el equipo de Míchel espabiló, y sumó tres victorias consecutivas. Dos a domicilio, ante Racing y Granada, ambas por 0-3; y una en Nervión, frente al Mallorca de Caparrós, por 3-1. 9 de 9, algo que no se conseguía desde hace 28 meses. Momentos felices por el que pasa el equipo y la afición.
Hasta este fin de semana, que volvió a caer ante el Athletic de Bielsa, por la mínima. El Sevilla jugó bien 15 minutos, desaprovechando dos ocasiones muy claras de Negredo. El Athletic tuvo unas cuantas y metió una. Esa fue la diferencia. No hubo puntería. Ellos jugaron mejor, nosotros hicimos una mala segunda mitad.
Resumiendo, el Sevilla de Míchel suma 5 victorias (frente a Osasuna, Valencia, Racing, Granada y Mallorca), un empate (ante el Atlético) y 4 derrotas (frente a la Real Sociedad, Sporting, Barcelona y Athletic).
16 puntos de 30 disputados, un 5,3 sobre 10, algo más de un suficiente. Números pobres que deben mejorar.
Desde que llegó Míchel, en el Sevilla han marcado Medel (2), Trochowski, Navas (3), Babá, Manu del Moral (5), y Negredo (2). 14 goles a favor y 9 en contra: +5.
Los próximos tres puntos tienen que ser nuestros como sea.
Estoy de acuerdo contigo en la parte de que "no se va a ganar todo", y lo veo normal, aunque no nos guste, algún partido tendremos que perder, pero estoy muy contento con lo que está realizando Míchel con el equipo, de como lo está sacando el pozo en el que se estaba metiendo y el nuevo estilo de juego que creo que ya ha conseguido darlo, yo lo renovaría para el año que viene sin pensarlo.
ResponderEliminarEnhorabuena por tu blog, sigue así.