Es obvio que el objetivo de un delantero es meter goles y ayudar a todo el equipo a ganar los partidos. Aunque, claro, no sólo el delantero o los delanteros están obligados a marcar.
Esta temporada, que ya ha concluido, sólo hemos tenido en la plantilla un sólo delantero. En condiciones, uno. Ese es Álvaro Negredo. El pasado 1 de junio cerró la mejor campaña de toda su carrera deportiva en cuanto a cifras goleadoras se refiere.
Con los cuatro que le hizo al Valencia (fue la primera vez que el vallecano mete tal cifra de goles en un mismo encuentro), Álvaro acumuló un total de 25 dianas en Liga que, junto a las 6 logradas en Copa del Rey, hacen un total de 31.
Con esos 25 goles superó los 24 de Roberto Soldado, precisamente al que se enfrentó este sábado en Nervión, proclamándose así máximo goleador español y ganador del Trofeo Zarra, del que ya suma dos, ambos con el Sevilla FC: uno en la temporada 2010/2011 (20 goles) y otro este mismo año, con 25. Los futbolistas que cuentan con este trofeo nacional son Villa (4), Negredo (2), Güiza (1), Llorente (1) y Soldado (1).
Más números. Con sus goles, el pichichi nacional le ha dado este año un total de 18 puntos al Sevilla, que suma 50 y que, sin esos 18 (que son un 36%) sería colista con 32. De los 38 partidos que forman la Liga española, Negredo ha marcado en 18 (casi un 50%). Y sí, lo sé, un delantero está para marcar goles.
El vallecano ha hecho este año más goles que otros futbolistas extranjeros tales como Lewandowski (20), Gareth Bale (21), Luis Suárez (23) o Di Natale (23).
Ahora, que si Del Bosque decide no convocarlo para la Copa Confederaciones, él sabrá lo que hace.
Es libre de hacerlo.
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