Nada fácil. Así se puede considerar el calendario que le queda por delante a nuestro Sevilla. Son tres los partidos y, por tanto, nueve los puntos restantes. Mis cuentas para conseguir el objetivo, y creo que las de cualquier sevillista, es ganarlo todo.
Pero como digo, no va a ser tarea fácil que esos nueve puntos acaben en nuestro casillero, y es que los tres próximos y últimos rivales tienen, a día de hoy, algo en juego.
El primero de ellos, la Real Sociedad (sábado a las 22h). El conjunto de Montanier está en zona Champions, 4ª, con 59 puntos, pero suma los mismos que el Valencia, que le sigue el rastro como 5º. La ventaja, en este caso, es que jugamos en casa, dónde el equipo se está mostrando muy fuerte y acumula un buen balance de puntos (37 de 51). Ganar sería aferrarse a las mínimas opciones, mientras que no hacerlo significará decirle adiós al 7º puesto.
Después, viaje a Pamplona (domingo 26 a las 20h), dónde tendremos enfrente a un Osasuna que actualmente se juega la vida, la categoría y permanecer un año más en Primera División. Eso sí, puede que cuando llegue este partido el conjunto de Mendilibar ya esté matemáticamente salvado, pues ahora se encuentra a 4 puntos del descenso y se puede ir a 7 faltando sólo 6 por repartirse. De todas maneras, ganar en ese estadio siempre es complicado, haya algo en juego o no.
Para acabar, un Valencia que, como dije antes, está luchando el 4º puesto de poder a poder con la Real Sociedad. Sin embargo, si el Sevilla logra vencer a los vascos esta semana, el Valencia podría llegar al Sánchez-Pizjuán con la Champions ya en el bolsillo de forma matemática. Por tanto, se antoja crucial el choque de este sábado. En el peor de los casos, en la última jornada los valencianos viajarían a la capital andaluza con la 4ª plaza en juego, aunque Nervión será la sede del encuentro, al que esperamos llegar con opciones europeas.
Como dato, decir que en la primera vuelta el Sevilla sólo fue capaz de sacar 3 puntos ante los rivales que nos quedan de aquí al final: perdió (2-1) ante la Real, ganó (1-0) a Osasuna y cayó (2-0) frente al Valencia. Casualmente, venció en el de casa y salió derrotado en los dos disputados a domicilio (la tónica de toda la temporada). En la segunda vuelta se invierten: dos en Nervión y uno fuera de casa.
Veremos qué ocurre.
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