Empate con sabor agridulce (2-2)

No estoy triste. Tampoco estoy contento. No se como explicar como me siento después del empate de mi equipo ante el Atlético.

Había que ganar, este partido era importante para seguir ahí arriba y luchar por puestos europeos. Pero claro, si no se puede conseguir los 3 puntos habrá que conseguir al menos 1. Y se consiguió.

En principio me gustó la alineación de mi Sevilla. La verdad es que me sorprendió la titularidad de Dabo, aunque debo decir que no hizo un mal partido. También me extraño que Manzano no pusiera a Sergio Sánchez. Pero bueno, eso ya es hablar por hablar.

El partido comenzó con una posesión igualada, aunque el Sevilla tenía sus llegadas. Parecía que al descanso llegaríamos con el resultado gafas, pero Negredo hizo un golazo cuando nadie lo esperaba. Descanso con una victoria momentánea, callando a la aficción del equipo local, que estuvo como siempre. Pero bueno, de eso ya hablaremos luego.

La segunda parte fue más de lo mismo, pero el Atlético empató muy pronto, a los dos minutos de la segunda parte marcaba Koke (y la gente se quejaba del cambio). Gol que sentaba mal al Sevilla FC, aunque, como dice su himno, nunca se rinden. Y así fue, pues Rakitic volvía a poner por delante a su equipo en el 65'. Segundo gol consecutivo de Rakitic, que se acomoda muy bien en el equipo, al igual que Medel. Diez minutos más tarde, el ex-sevillista Reyes volvía a empatar el partido. Incluso pudieron adelantarse por una cesión de Javi Varas, pero el porterazo del Sevilla lo paraba con los pies evitando el 3-2. Al final del partido Negredo le dio al larguero y Capel pudo rematar, pero lo derribaron en el área. Como siempre el árbitro no pitó penalti.

El empate puede ser valioso, ya se verá a final de temporada. Varas de nuevo hizo un partidazo, haciendo verdaderos paradones. Parece que le está quitando la titularidad a Palop. Buen partido también de las nuevas incorporaciones, Rakitic y Medel. Luisfa y Negredo se compenetraron bastante bien. Y decían los periodistas que no podían jugar juntos porque no se entendían. Ellos entienden...

Partido de alta tensión decían algunos. Pues se demostró que sí. Los gritos de la aficción del Atlético siempre tienen que predominar en estos encuentros.

En cuanto al árbitro, perdonó la roja y la amarilla a algunos jugadores del Atlético, y no pitó penalti cuando derribaron a Capel. Dicen que no es penalti, pues yo digo que sí, y lo veo, veo el derribo, el empuje, la caída dentro del área. Pero el árbitro, cerca que estaba, se hizo el ciego y dejó seguir el juego.

El Sevilla FC demuestra que está peleando por los puestos europes y, por que no, los de Champions. Ni triste ni contento. Ahí ahí. Veremos a ver que pasa contra el Sporting. Es este martes. Sí, así es. Martes a las 22h de la noche. Hay que ganar sí o sí. Podemos conseguirlo.

¡Viva el Sevilla!